Pasadas
ya 4 semanas de los lamentables sucesos del Borda, en los que la salvaje
represión de la Policía Metropolita provocó un saldo de más de 60 heridos y
varios detenidos, incluidos trabajadores de prensa, el artículo se propone desentrañar
cual es la estrategia de avance en el lugar por parte del Gobierno de la
Ciudad, señalando la larga serie de cuestiones que la gestión Macri está
dispuesta a vulnerar para llevar adelante el denominado Distrito Gubernamental.
Hace ya un
mes que se produjo aquella lamentable jornada en la que el Ministro de
Desarrollo urbana Arq. Chain , con al aval María Eugenia Vidal y Mauricio
Macri, ordenaron demoler el taller protegido nº 19 del Hospital Borda a sangre y fuego, produciéndose un saldo de más
de 60 heridos por la salvaje represión de la Policía Metropolitana. Si bien
estos hecho tuvieron una repercusión muy grande en la esfera pública, destacándose
la masiva marcha de unidad convocada por la Asociación Trabajadores del Estado
(ATE) el pasado 30 de abril a la Jefatura de Gobierno Porteña, la operatoria
que llevó adelante el Macrismo para ir construyendo las condiciones de
posibilidad que hagan posible la construcción del distrito gubernamental ha
sido menos difundida.
El proyecto del Distrito Gubernamental, en primer
lugar, para luego poder construir el Centro Cívico, pretende ser un mascarón de
proa para un gran proyecto de gentrificación en la zona de Barracas, dado que
por su cercanía al centro, es una zona propicia para el desarrollo de proyectos
de vivienda orientados a sectores de la clase media – alta, generando, de esta
manera, rentables proyectos de inversión para desarrolladores inmobiliarios que
ya cuentan con suelo en la zona, es decir, han comprado distintos terrenos a
precios muy bajos y estar esperando que el Estado de la ciudad invierta en la
zona para que estos lotes aumenten su valor.
De esta manera, resulta productivo problematizar la relación
Macrismo – retirada del Estado, dado justamente lo que estamos discutiendo es
como el mercado se apropia de inversión social realizada por el Estado. Creemos
que la política de desarrollo urbano y vivienda llevada adelante por la gestión
Pro debemos estudiarla en su unidad, en relación al modelo de ciudad que
propone y sobre que sociabilidades se despliega. En este sentido, existe un
proyecto de ciudad excluyente, donde no siempre la política pública está
caracterizada por la retirada del Estado o el vaciamiento de lo público bajo la
lógica del neoliberalismo más clásico, sino que representa formas más complejas
y cotidianas, donde si bien prima una tendencia hacia la expulsión de los
sectores populares de la ciudad, no siempre de la mano de la coerción.
Creemos que la imagen que caracteriza a la actual gestión del
Gobierno de la Ciudad como hombre de
negocios, dispuestos a todo para realizar su interés de clase, sin ninguna
preparación, que destruyen la ciudad día a día, y propugnan el abandono del sur
de la ciudad es profundamente errada. Esto no implica que no sean todas esas
cosas a la vez, y otras también, pero la caracterización implica que puede
existir una política sin sujetos. Como bien sabemos, la política pública es
pública porque en el Estado se dirimen cuestiones socialmente problematizadas,
en tanto éste, además de un aparato material, es una relación social.
Claramente existe una política específica del Macrismo hacia el
sur de la ciudad, que se encuentra dividida, por lo menos, en dos zonas. La
primera es la más cercana al centro (La Boca, Barracas, Parque Patricios y
Pompeya), aquí se busca profundizar procesos de gentrificación (expulsión de
ciertos sectores para que se asienten otros), y propugnar el desarrollo de
distritos (Las Artes en la Boca y Tecnológico en Parque Patricios), generando
la incorporación de suelo para el desarrollo inmobiliario residencial y
comercial. La segunda está comprendida por los barrios de Villa Soldati, Bajo
Flores, Villa Lugano y Villa Riahuelo, donde, excepto algunas zonas puntuales
como Villa Riachuelo, se busca garantizar la gobernabilidad y presentar logros
específicos de cara al resto de la ciudadanía
Por otra parte, resulta fundamental poner en relación los
proyectos que se están realizando en el sur de la ciudad con una marcada
heterogeneidad de situaciones que existen en el área. En este sentido, los
distintos contextos y órdenes
urbanos existentes significan diferentes formas de producción y organización
del espacio, donde operan sentidos de demarcación entre distancia social y
proximidad residencial. Es dentro de estos intersticios donde el Macrismo
opera, ya sea de manera simbólica o con proyectos concretos. Nótese que la
política urbana del Pro se monta sobre sociabilidades existentes,
reconfigurándolas y articulándolas en un discurso
Respecto a la construcción del distrito gubernamental, resulta
llamativo que un proyecto pueda vulnerar tantas cuestiones al mismo tiempo. En
términos de normativa urbana, el hospital Borda está emplazado en una parcela
única que posee una zonificación especial, de un gran equipamiento de salud,
denominada E4 33. Con especial nos estamos refiriendo a que el Código de
Planeamiento Urbano le asigna un uso determinado que sólo admite hasta un 20%
de la parcela para un uso complementario o conexo (ej. un restaurant destinado
a la gente que visita el hospital, un estacionamiento, etc.),
Según explicó el Ministro Chain en su visita a la Legislatura
de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, su gestión ha subdividido la parcela
única que ocupa el Hospital Borda en dos fracciones adicionales que serían
destinadas a construir el distrito gubernamental. El permiso de uso, según el
funcionario, está dado porque el mismo constituye un uso de carácter
complementario.
Ahora bien, Chain se contradice y pretende justificar la
injustificable, dado que si la gestión pretende cambiar el uso o la
zonificación de una parcela, dado que es un cambio en el Código de Planeamiento
Urbano, debe remitir un proyecto de ley a la Legislatura para que sea aprobado
por un mayoría especial (40 votos). Afirmamos esta cuestión porque si sería la
misma parcela claramente el uso de las parcelas adicionales no son
complementarias porque no tienen nada que ver un edificio gubernamental con un
hospital. A la vez, si se realizó una subdivisión que incorporó dos parcelas
adicionales, esto produjo un cambio de zonificación, dado que le están
cambiando el uso de la zona de equipamiento especial Hospital Borda (E4 33) a
otro tipo de equipamiento especial, es decir, este cambio debería ser autorizado
por la Legislatura de la Ciudad y figurar en el Código de Planeamiento Urbano.
Conclusión, el Jefe de Gobierno Mauricio Macri debe remitir el
proyecto a la Legislatura de la Ciudad Autónoma, dado que no existe monarquía
todavía en Buenos Aires City.
Por otra parte, también es verdad que existen leyes de
protección patrimonial e histórica del Hospital. En 1991 se declaró monumento
histórico nacional el edificio y el parque que los rodea, mientras que en el
año 2010 la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sancionó la
protección, en su mayoría cautelar, de todos los edificios del Hospital,
afirmando que toda construcción que se realizase en el predio debía respetar
morfología de estos, sin poder modificar la topografía del terreno, cuestión que
va a ser vulnerada dado que el proyecto que ganó el concurso del Distrito
Gubernamental se caracteriza por ser un construcción de una altura mayor a la existente en el Hospital, además que
seguramente se modifiquen los niveles del suelo y demás.
También podríamos afirma que no tiene fundamento jurídico decir
que existe una ley votada en diciembre último que autoriza la construcción del
proyecto en los terrenos del Borda. Si bien creemos que la votación de ésta por
parte de ciertos sectores de la oposición en la Legislatura fue un importante
error, dado que autoriza la venta del Edificio del Plata, despejándole ciertos obstáculos al Macrismo,
en ningún lugar esta ley autoriza a construir el Distrito Gubernamental y
Centro Cívico allí, sino que expresa que debe construirse en el Sur de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Por último, como bien se sabe el proyecto también vulnera el
protocolo de manejo de… , material que, si es manipulado sin tomar las medidas
correspondientes, puede provocar serios daños a la salud.
La operatoria es clara y se repite en diversas políticas
llevadas adelante por el Macrismo: avanzar para convalidar, es decir, el
distrito gubernamental es la punta de avance que encontró la gestión para construir
el proyecto del Nuevo Centro Cívico, en el cual los Hospitales Borda, Moyano y
Tobar García desaparecen del mapa de Barracas. Creemos que poder reconstruir
las claves de la estrategia del Macrismo hacia distintos proyectos ayuda a
construir una oposición que pueda transcender la mera denuncia para
constituirse en una política de reemplazo que pueda en el 2015 construir un
proyecto que invite a reinvertar esta ciudad en un clave popular y democrática.